El agua es el elemento de la vida. Nuestros cuerpos contienen más agua de 70% y no podemos sobrevivir más de unos días sin él. Con esto en mente, el agua también es ideal para perder peso. Una hidratación adecuada es vital para una dieta para bajar de peso y pueden tener una gran influencia.
El hígado es vital en la filtración de las toxinas en el torrente sanguíneo, lo que permite un buen funcionamiento de nuestro cuerpo. También convierte la grasa en energía necesaria para que el cuerpo funcione. La velocidad a la que el hígado puede procesar las toxinas es proporcional a la cantidad de agua que llega a hacerlo.
Cuando consumimos agua que insta a suprimir nuestra y también la fuerza al cuerpo a quemar más recursos con el fin de procesarlo. La tasa metabólica es mayor que conduce a una mayor velocidad de combustión de calorías. Además, el cuerpo necesita para mantener el agua a la temperatura con el resto del cuerpo, por lo que requiere aún más energía.
Si usted está en una dieta, su cuerpo debe ser incapaz de conseguir toda esta energía de lo que han consumido durante el día. Debido a esto, la grasa acumulada para un uso posterior se agotarán.
Otra de las razones por qué el agua lo convierte en un gran aliado en la pérdida de peso es que a veces, cuando sentimos hambre en realidad estamos sedientos. El cerebro confunde las dos señales porque la comida contiene demasiada agua. Así que si nos remontamos un poco, esto en realidad puede ser responsable de la obesidad. Nuestro cerebro está confundido y en vez de pedir agua, se le pide más comida, que estaremos encantados de proporcionar.
